"Tuve un técnico en Nacional, que ahorita es el técnico de la Selección de Panamá, Nelson Gallego. Él una vez me cogió, yo estaba en las divisiones menores, y me dijo "vos vas a ser un volante con mucho gol". Empecé a trabajar con él individualmente, después de los entrenamientos me quedaba con él teniendo 12 años, y ahí empecé a coger esa buena pegada que ahorita tengo". Edwin Cardona, la leyenda de Belén / Rayados TV
Así inició el camino de uno de los mejores jugadores del fútbol colombiano con remate de media distancia. Constancia y trabajo fueron las claves del antioqueño para perfeccionar su Maleddeta, como se le dice a la técnica perfecta para patear el balón.
Nacional, Santafe, Junior, Monterrey y Boca Juniors marcaron el legado Cardona. Inscribió en las redes goles memorables, como aquel que le marcó de tiro libre a River Plate en el Monumental.
Los logros del antioqueño están inspirados en su familia, a la que recuerda con gran cariño y en el corazón ya que marcó su trasegar en el fútbol.
"Mi papá no tenía la oportunidad de irme a ver a veces jugar por la economía que teníamos. Eramos 4 hermanos. Mi papá se iba en bicicleta una hora, llevaba a veces a mi mamá en la barra para irme a verme jugar", recuerda con cariño Edwin Cardona. Con el paso de los años, el talante del volante del Pachuca fue creciendo y la vuelta de tuerca golpeó la economía de su familia. "Mi mamá me manejaba la plata. Yo me ganaba 300 dólares. Lo primero que hizo fue mercar. Yo estaba feliz porque mis hermanos comían una vez bien", recuerda el volante antioqueño.
La Herencia del 10
Edwin Cardona no olvida su barrio -Belén Buenavista-, su gente, la que mantiene vigente su apoyo en cada paso que da. Ahora el camino dicta un nuevo capítulo en Boca Juniors de Argentina, donde rinde homenaje a Diego Maradona y a Juan Román Riquelme con la magia del 10.
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