En Cucaita (Colombia), se forjó el sueño. A 2650 metros sobre el nivel del mar y rodeada por sembrÃos del altiplano cundiboyacense, se construyó la historia de Carolina Munevar, la leyenda del ciclismo paralÃmpico.
A sus 7 años inició la pasión que la llevó a recorrer con entereza las calles de su pueblo natal, asà como lo hizo en el Mundial de ruta en Cascais, Portugal 2021, donde consiguió la medalla de oro en la contrareloj individual con un tiempo de 28:43 segundos.
En tierras lusas, la boyacense enfrentó un reto de alta complejidad. El control de cabra, el sprint y la cadencia fueron tres tempos que logró sincronizar. Era una prueba en 'circuito en un autodromo. HabÃa que ser precavido pero arriesgar un poco en algunas curvas. Además, tenÃamos el factor viento'. contó Carolina Múnevar a La 10Co sobre la experiencia en el viejo continente.
El triunfo marcó la madurez en su carrera. Es una de las mejores en su disciplina. Sin embargo, tras estos hitos se esconden capÃtulos de vida que pusieron a prueba la leyenda de Carolina Munevar.
SÃn lÃmites
En 2014 el destino marcó un giro de tuerca. El mundo sobre dos ruedas se tornó en competencias de paraciclismo tras un accidente en el que perdió su pierna izquierda.
El panorama no era alentador. La fecha de regreso no estaba en el calendario.
No obstante, con el apoyo de su familia y colegas de vida, regresó a la pista. Con nuevos aires y un espÃritu competitivo emprendió el camino del ciclismo sin lÃmites.
En 2015, Carolina Munevar reapareció en las pistas de los Juegos Paranacionales en Motavita en Pruebas de contrarreloj y Ruta Fondo. Luego aterrizó en el Mundial de ruta en Nottwil, Suiza, y en los Panamericanos de Toronto.
Este impulso lo consiguió con el apoyo de su guÃa y maestro, José 'Chepe'Castro, el técnico de la Selección Colombia de paraciclismo, quien ha sido su bastión desde el inicio.
El talante de la leyenda boyacense le ha permitido afrontar retos que la han llevado al lÃmite, como sucedió en los mundiales de Italia 2016, 2017 y 2018; carreras exigentes con terrenos de subida y bajada que obligaron al riesgo y marcaron la adrenalina a tope.
Gratitud
"El ciclismo adaptado me ha dado la oportunidad de correr a nivel internacional, un detalle, un regalo del universo. El hecho de compertir con otras mujeres me hace una persona agradecida y feliz. Era un sueño que no se realizó a nivel convencional pero si paralÃmpico", relató Carolina a La10co.
'Luchar hasta el final' ha sido la frase de batalla que la inspira a superarse en cada competencia y que le permite rememorar aquella conexión que su padre le compartió cuando recién tenÃa 7 años.
Carolina Munevar continúa escribiendo memorias de gloria en el ciclismo paralÃmpico. A sus 26 años, agradece al 'Profe' Rafael Antonio Niño, la creación de escuela ciclismo en Cucaita, y enaltece el nombre de MarÃa Luisa Calle, la ciclista que la inspiró a conquistar el mundo sÃn limites.
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