Era el único que tenía esa clase de cicla, mientras que los demás tenían sólo Mountain Bike, lo que comúnmente se llama MTB. Para adaptarme, tuve que cambiar la rutera por una MTB, es por eso que hoy por hoy entreno constantemente todas las mañanas en ese caballito de oro. A veces compito con mis compañeros de entrenamiento, como también participó en todas las competencias que organizan: cronos de 13 km, de 17 km; la sprint de 60 km, donde me he ubicado en el puesto octavo o noveno entre 40 ciclistas. Esto quiere decir que hay que mejorar con trabajo constante.
El trabajo del día a día lo hago con la intención de ser el mejor de la región y de esta manera llegar a ser profesional de aquí a 4 años y competir con ciclistas de talla mundial.
Sueño siempre con dejar en alto el nombre de Colombia. Mantener ese potencial de ciclismo que tiene, aportar al país los logros que obtendré y de esta forma salir adelante. Quiero ser tal cual como NairoMan.
Por: Ángel Manuel Gaitán Marchena